Un “picante” terminó en la Comisaría de Rawson por negarse al test de alcoholemia
Un inconsciente que perdió los estribos terminó en la Comisaría de Rawson por negarse al test de alcoholemia, en un control vehicular realizado entre el viernes por la noche y la madrugada del sábado sobre la Avenida 9 de Julio, en inmediaciones al edificio de SEROS.
El sujeto, tras resistirse a la pipeta, vocalizó una secuencia de adjetivos calificativos desapegados a la amistad purítana contra los inspectores de la Dirección General de Seguridad Ciudadana, Tránsito y Transporte del municipio local y efectivos de la Policía del Chubut. La escena, propia de una ficción de acción, obligó a que los uniformados actúen y trasladen al desacatado a la comisaría capitalina.

El “picante” se calmó cuando identificó que estaba en un cubo frío, donde las respuestas a sus peticiones sólo las encontraba en el silencio impenetrable. Su desacato le costó esa madrugada y unos cuantos meses, ya que también se procedió al secuestro de su vehículo.
De acuerdo a la información que trascendió, se realizaron 60 testeos por alcoholemia durante la madrugada del sábado y domingo, primero en el ingreso a Rawson por ruta 7, sobre la Avenida 9 de Julio, y al otro día en la doble vía que une la capital con Playa Unión.
Otro de los inconscientes al volante fue demorado por conducir con 0,62 de alcohol en sangre, por lo que también se actuó con rigor.
Culminados los procedimientos se registraron seis infracciones por carnet vencido, alcoholemias, vehículos transitando sin seguros obligatorios, impuesto Automotor adeudado y secuestros de documentación a personas no habilitadas para conducir.