Tras una serie de ataques en Kabul, (capital de Afganistán), adjudicados por el Estado Islámico (ISIS) a través de un mensaje difundido por el canal de la milicia extremista, los terroristas atacaron a las fuerzas talibanes.
Los ataques dejaron más de 100 muertos y según autoridades de Estados Unidos podrían producirse nuevas embestidas, antes de su retirada definitiva.
Los miembros de ISIS tendrían la intención de intentar apoderarse de Afganistán tras la salida de la coalición internacional. Las fuerzas talibanes no son suficientes para disuadirlos.
Los enfrentamientos a los talibanes se produjeron en el Este del país y además fuentes informaron que miles de terroristas de ISIS lograron tomar el control de una gran región, tras penetrar libremente desde el territorio de Pakistán.
Según los informes, los talibanes no pueden contener el ataque de los terroristas del Estado Islámico. Pero cabe la posibilidad de que Estados Unidos pueda intervenir, en virtud de que su presidente Joe Biden ordenó ataques contra ISIS en respuesta a los ataques terroristas, que provocaron la muerte de 18 militares norteamericanos.
Se especula con que las fuerzas de resistencia pueden asistir a los talibanes en Panjshir, cerca de las zonas controladas en las que se están produciendo los principales enfrentamientos.