Ofuscados por el “ninguneo permanente” y la “postergación” a la que son sometidos por parte del Gobierno que comanda Mariano Arcioni, los estatales confluyeron este jueves en una concurrida movilización en Rawson; señal de reclamo que se repitió en otros puntos del Chubut.
Deudas salariales, congelamiento de sueldos, entre otros ítems particulares a los sectores de la salud y educación, fueron parte de las exigencias legítimas de los trabajadores, que hace 20 meses no conocen buenas intenciones.
“Que se vayan quienes tengan que hacerlo, porque nadie escucha nuestro reclamo”, expresaron algunos dirigentes a la masa obrera aglutinada en Casa de Gobierno. Molestos por el silencio organizado de Fontana 50, los trabajadores ya advirtieron endurecer los planes de lucha para generar mayor impacto en la impermeabilidad espiritual de un gobernador que se sostiene por sus alrededores obsecuentes.
La corriente de trabajadores educativos y sanitarios recorrieron las calles de Rawson para exponer ante el vecino sus peticiones incumplidas.
Educación
En el caso de los docentes, sostienen el pedido de recomposición salarial y otras condiciones para una alcanzar una educación de calidad. “Sin educación técnica, es muy difícil pensar en un desarrollo productivo para Chubut”, esgrimieron.
A eso, se sumó el pedido de una convocatoria a paritarias urgente. “Queremos que el Gobierno se digne a llamarnos para actualizar los salarios”, añadieron.
Salud
Desde el lado de la salud, los agentes cuestionaron que “estamos ante un Gobierno que no nos escucha, nos ningunea, posterga y quiere quebrarnos”. Lejos de debilitar al sector, los trabajadores redoblaron la apuesta: “Iremos a un paro de 120 horas a partir del 6 de septiembre”, dijeron.
“Vamos a seguir poniendo el cuerpo en la calle y donde lo tengamos que poner para demostrarle al Gobierno que tenemos dignidad y haremos cumplir nuestros derechos. No nos vamos a callar nunca más. Somos trabajadores y luchadores dignos”, esgrimieron.