La interna peronista por la minería, abrió la grieta en la UCR
Ni el mejor estratega hubiera planificado una maniobra que desnude las dantescas internas que sostienen -y ya no existen herramientas mediadoras para ocultarlas-, el peronismo y el radicalismo en Chubut. Y ante los desequilibrios emocionales personales-dirigenciales se acompleja el crecimiento sin pausa de cualquier comunidad; en definitiva la transformación real depende de la aptitud de una minoría que siempre persigue un interés equívoco.
Mientras existan divisiones ideológicas -cuyos orígenes coinciden con el rencor o la especulación subjetiva-, las instituciones no traccionarán y el beneficio recaerá en quienes actúan para el particular, sus intereses y los adherentes temporales. El A, B, C de la política mal habida será rentable para aquellos que huelen negocio, sea peronista o radical; también existen otros, pero la estructura es similar.
PJ desequilibrado
La votación de la Iniciativa Popular (IP) en la Legislatura no sólo definió la interna feroz que atraviesa el peronismo; un oficialismo que no termina de convencer ni de convencerse, sin tacto de la situación escabrosa de la provincia, habitando una ficción ilustrada al óleo, demostrando desinterés ante el apremio. Del otro lado, un justicialismo rebelde, actuando como oposición dudosa, cuando el electorado identifica que representan lo mismo, responden a un principio, un ideal social alejado de las bases defendidas por el General. Mutó, entonces, hasta la consideración casi bíblica de aquellos apartados fundacionales de la Justicia Social.
UCR caliente
También la IP reanimó las sangrientas diferencias de la UCR. La nula intervención de dos diputados -al momento de votar el proyecto que prohibía la actividad minera en Chubut-, fueron suficientes para activar el volcán radical, acostumbrado en las últimas décadas a la inestabilidad funcional-estructural.
El silencio de Manuel Pagliaroni y Andrea Aguilera fue desequilibrante. “El que calla otorga” dice el dicho popular; y las especulaciones variaron en apenas cuatro días de aquella nefasta intervención en el recinto. Alejada del poder, la UCR pretendía encaminar el rumbo mediante un proyecto sólido, que lo faculte al máximo, sin embargo, cayó al vacío, y las personas tienen memoria.
Pronunciamientos
Los comités departamentales del radicalismo en Chubut firmaron una nota repudiando el accionar de Pagliaroni y Aguilera en el recinto. “Es inaceptable que le den la espalda a la ciudadanía chubutense”, indica el texto firmado por varios dirigentes. “Habilitaron el saqueo minero del Gobierno provincial”, concluyeron.

La defensa
El partido centenario, a través del Comité Provincia y de sus autoridades con Mandato Cumplido, defendieron el papel de los legisladores. “Debieron afrontar una decisión difícil: votar una Iniciativa Popular y la convicción necesaria de no afectar un solo puesto de trabajo”, frente a las cláusulas que disponía el proyecto ambiental.
