“Una megasequía”, concepto escogido por los especialistas para explicar el fenómeno, esta generando un retroceso en la capa de nieve del cordón montañoso de los Andes.
La disminución de nevadas y precipitaciones dejaron expuestas los fragmentos de tierra en la cordillera, fenómeno que se acentuó en los últimos años.
Imágenes satelitales captadas el 27 de julio de 2020 y el 29 de julio de este año, respectivamente, por el satélite Copernicus Sentinel-3 de la Agencia Espacial Europea (ESA), muestran que el manto blanco ya no representa la misma densidad.
Este fenómeno sucede en medio de una sequía que se prolonga ya durante una década y que los expertos atribuyen al calentamiento global. El fenómeno viene acompañado de una precipitada caída en el caudal de ríos en la región.
El investigador del Instituto Argentino de Nivología, Glaciología y Ciencias Ambientales (IANIGLA), Ricardo Villalba, explicó que la contracción de glaciares amenaza con afectar el abastecimiento de agua, un recurso vital que algunas comunidades de la región obtienen de las montañas.
“Aquí estamos viendo un proceso de disminución a largo plazo en precipitaciones, una megasequía”, comentó el experto.